Sinopsis
Peter sigue sin trabajo y engordando por momentos, por lo que decide atender a su verdadera vocación, la pesca. Al no tener el suficiente dinero para comprar un barco, acude a una subasta de la policía. Finalmente consigue uno, por el que deberá firmar un contrato que le dejará endeudado eternamente.
Cuando Peter averigua la existencia de un pez muy preciado, considera que ha llegado el momento de conseguir recuperar su dinero y sus bienes embargados y se aventura con su flota.