Sinopsis
Charlie se despierta aterrorizado de una pesadilla en la que veía cómo Aaron –el hijo de Claire- corría peligro y no podía acercarse a él para salvarle.
Locke, consciente de que Charlie ha tenido pesadillas durante varias noches, se empieza a preocupar por joven. Piensa que ese afán por salvar a Aaron es porque Charlie ha perdido toda credibilidad ante los demás, y ayudar al niño es ayudarse a si mismo. Además, sospecha de que ha vuelto a caer en las drogas.
Claire habla con el señor Eko -ya que continúa creyendo que es un sacerdote-, para bautizar a su hijo, y después de la insistencia de Charlie con respecto al peligro que corre el niño, quiere bautizarlo.
Sawyer sigue recuperándose poco a poco, y esto le permite ir descubriendo cómo se están produciendo pequeños acercamientos entre los dos grupos. Por eso insta a Hurley a que intente conquistar a Lily, de la que se siente atraído.