Sinopsis
Lincoln, que cree ver a su padre el día de la ejecución, gana dos semanas cuando un juez ordena la exhumación del cuerpo de Terence Steadman; Sucre pide un favor: que ayuden a Michael a encontrar, en el complicado sistema de desagüe, una nueva ruta hasta la enfermería.
Mientras atan a Lincoln a la silla eléctrica, Michael y Verónica observan desde un cuarto contiguo junto a un gran número de invitados. Lincoln reconoce a uno de ellos justo cuando el guardia le coloca la capucha sobre su cara. En el momento en que van a conectar la electricidad un guardia cierra repentinamente la ventana. Poco después, Pope ingresa al cuarto contiguo con Lincoln y explica que hubo un aplazamiento de último momento. Verónica abraza a Lincoln y corre a averiguar que sucedió. Lincoln le pregunta a Michael si vio al hombre que estaba parado detrás suyo. Michael le contesta que no lo vio y Lincoln le explica que era su padre (a quien no ven desde hace más de treinta años).
La Vicepresidente averigua que el Juez Kessler ordenó el aplazamiento de la sentencia luego de que una fuente anónima introdujo nueva información en el caso y ordena a Kellerman que descubra quién fue. Verónica se encuentra con Kessler que le comenta que alguien dejó un sobre afuera de su oficina con dos papeles: el informe de la autopsia de Steadman, que señala que su apéndice no fue extirpado; y el informe de un médico que indica que Steadman tuvo una apendicetomía a los doce años.
El juez no sabe muy bien qué creer y ordenó la exhumación del cuerpo para obtener las respuestas. Verónica se comunica con Michael para contarle las novedades. Michael le dice a Sucre que deben volver a su trabajo. Minutos más tarde, Michael examina una parte del tatuaje que tiene en su espalda y encuentra otra ruta hacia la enfermería a través del complicado sistema de desagüe cloacal debajo de la sala de psiquiatría. Lincoln pregunta a Pope sobre el hombre que vio en el cuarto contiguo. Pope revisa el registro de visitas y le dice que se llama William Prall, desconocido para Lincoln. Poco después, vestido con ropa que lo identifica por nombre, Michael explica a su equipo que hay un caño por el que pueden trasladarse desde el cuarto de los guardias hasta una rejilla a mitad de camino a la sala de psiquiatría. El único detalle es que esa rejilla los deja exactamente en el lugar donde están parados ahora: en la mitad del patio.
Mientras trabajan, intercambian entre ellos historias de terror ocurridas en la sala de psiquiatría. Michael intenta averiguar cómo llegar hasta allí desde la rejilla sin ser visto. Sucre ve a Manche, su primo, al otro lado del patio y tiene una idea. La Vicepresidente da una conferencia de prensa en la que manifiesta su indignación con respecto a la exhumación del cadáver. Verónica y Nick observan cómo levantan el ataúd de Steadman. Lincoln sueña que va a un partido de baseball con su padre y mira fijamente al lanzador calentando su brazo. Sucre encuentra a Manche en la lavandería y lo presiona para que le haga un favor.
Poco después, mientras el equipo con el atuendo adecuado trabaja en el cuarto de los guardias, Westmoreland ve que a C-Note se le cae una postal de Irak. En ese momento, C-Note observa una rotura en la pared que podría ceder desparramando todos los escombros que escondieron detrás. Bellick ingresa al cuarto y C-Note se apoya contra el panel para evitar que se desmorone. Bellick le dice que se mueva. Westmoreland ocupa su lugar. Bellick abandona el cuarto, Westmoreland se aleja del panel y la pared se derrumba, desparramando escombros por todos lados. Antes de que logren limpiar todo, ven a dos guardias acercarse, conversando sobre fútbol americano.
Uno de ellos pregunta a T-Bag, que custodia la puerta, si sabe a qué universidad asistió un famoso jugador. T-Bag no sabe la respuesta y los guardias deciden preguntar a los hombres que están adentro. Justo en ese momento T-Bag recuerda la respuesta y los guardias continúan su recorrido. Más tarde, cuando los hombres terminan de levantar todos los escombros, Westmoreland le dice a C-Note que lo descubrió: está enviando a su hija postales de Irak para que crea que está en la guerra y no en la cárcel. Westmoreland le advierte que cuando escape no vaya directo a su casa… aunque luego admite que él piensa hacer lo mismo. Cuando los hombres están de vuelta en sus celdas, Manche entrega a Sucre y Michael algo envuelto en una bolsa de basura.
Luego, durante el control, Lincoln pregunta a Sara si el estrés puede hacer que esté viendo cosas. Sara le dice que es posible. Esa noche Lincoln vuelve a soñar con el partido de baseball. Esta vez logra ver el nombre en la camiseta del lanzador – Prall – y se despierta más seguro que nunca de que “William Prall” era su padre. Michael estudia la complicada trama de los tubos centenarios en su tatuaje, luego toma el paquete de Manche y se escabulle. Llega hasta la rejilla del patio y abre el paquete. Poco después, la rejilla se abre y aparece Michael… vestido con el uniforme de un guardia.
En ese momento, un reflector lo ilumina. Michael queda inmóvil pero el reflector continúa su recorrido y él avanza hacia la sala de psiquiatría, donde le dice al Guardia Sklar que necesita usar el baño. En el camino, Michael se desvía hacia el sótano, donde ubica la escotilla que da a un antiguo sistema séptico. Sklar lo descubre y le pregunta qué hace. Michael le dice que se perdió y Sklar le señala el camino hasta el baño. Un patólogo examina el cuerpo de Steadman dentro del ataúd, en avanzado estado de descomposición. Informa a Nick y Verónica que la dentadura coincide con el registro dental de Steadman. En la prisión, Sucre sufre durante la rutina de control de camas hasta que Michael logra regresar a la celda. Pero, en el camino de regreso, se encontró con un guardia que bebía de una petaca cerca de la caldera. Esto lo obligó a apoyarse contra los caños hirvientes y mantenerse quieto hasta que el guardia termino de beber y se fue.
Ahora que finalmente está en la celda pide a Sucre que lo ayude a sacarse la camisa del uniforme, ya que la tela está pegada contra su piel quemada. Sucre tira y el dolor es tan fuerte que Michael se desmaya.
Michael se despierta en la enfermería mientras Sara le cura la herida y le pregunta quién lo lastimo. Bellick le hace la misma pregunta. Poco después, Sucre le dice a Manche que no podrá devolverle la camisa del guardia… justo cuando llega Geary exigiéndola. Manche le muestra la camisa quemada y le explica que dejó la plancha apoyada. Geary se va. Mientras tanto, Lincoln le cuenta a Verónica sobre la visita de su padre. Verónica no cree que haya sido posible. Lincoln le cuenta que recuerda que una vez vieron juntos un partido en el que el lanzador se llamaba William Prall. Verónica le explica que es posible que lo haya soñado luego de la visita del periodista.
Lincoln reconoce que puede ser cierto. En ese mismo momento, Kellerman revisa las cintas del sistema de seguridad del tribunal y descubre que el hombre que dejó el sobre en la puerta de su oficina es el mismo visitante misterioso. En la prisión Sara enseña a Katie, una enfermera, el trozo de tela que extrajo de la espalda de Michael y lo identifican como parte del uniforme de los guardias. Michael, ya de vuelta en su celda, se quita la venda y revisa el tatuaje. Observa que falta la parte que muestra la cañería que va desde la sala de psiquiatría hasta la enfermería - el mapa de ruta hacia la libertad.