En esta temporada, todo el equipo se reúne para atrapar de una vez por todas a Capucha Negra, quien parece no cansarse del oscuro juego que ha creado con prácticamente todos los ciudadanos de Riverdale. Aunque eso sí, Betty (Lily Reinhart) sigue siendo la intocable de este tenebroso asesino en serie.
Por otra parte, Veronica (Camila Mendes) accede a ayudar a su padre en los turbios asuntos que le envuelven, consiguiendo que Archie (K.J. Apa) acabe también involucrado en todo ello. Aunque el hecho de que Archie acabe tan comprometido con los negocios del padre de Veronica, no es algo que a ella le haga especial gracia.
Respecto al resto de la ciudad, las tensiones entre el Norte y el Sur de la ciudad están más presentes que nunca, por lo que se podría avecinar una guerra dentro de Riverdale casi inminente.