Sinopsis
Diana y Blanca aún no pueden creerse que Celia les mintiese y se sienten muy defraudadas, pero Salvador les hace ver que la prioridad ahora es sacarla de la cárcel y lo mejor es contratar a un buen abogado. Cándida cuenta a Ricardo que Rebeca ha desaparecido y cree que Tristán ha tenido algo que ver. Ricardo le dice que se enfrente a él y que no permita que las chicas se vayan de la lengua. Andrea pide a Cristóbal no morir en el hospital y le ruega que la saque de allí. Úrsula sale de la cárcel y se reencuentra con Gabriel, que no disimula su enfado con Velasco a quien culpa de manera injusta de la detención de Úrsula.
Velasco visita a Celia con buenas noticias: el juez está dispuesto a liberarla si ella muestra arrepentimiento. Pero la hermana se niega a traicionar sus ideales. Blanca exige a don Ricardo que deje en paz a Amalia. Su tío se burla de esa actitud proteccionista hacia la mujer que le robó el marido. Tristán cuenta a Cristóbal que está empezando una relación con Blanca y le miente diciéndole que la hermana sabe que es judío. La Silva, al saber que Tristán se lo ha contado todo a Cristóbal, se enfada con él. Diana carga contra Salvador por defender a Elpidia, tras conocer que las niñas han sufrido una recaída. Mientras, consigue que la fábrica vuelva a la normalidad, pero Rodolfo se resiste a dar el mando a la hermana…
Luis le cuenta a Marina que empezará a trabajar de nuevo para don Ricardo. Ella no quiere que se acerque al hombre que tanto daño les hizo, pero Luis ve una oportunidad de venganza.
Sofía pone a Elisa en un aprieto con el asunto de su profesor de francés, al tiempo que pide a Ciro que dé una charla en un acto benéfico para recaudar fondos para los soldados aliados.
Rodolfo sigue con sus planes para casarse con Amalia. La chica disimula su preocupación…