Sinopsis
Don Ricardo vive con alivio, la noticia de que Elisa y Gonzalo no han podido contraer matrimonio a causa de un error burocrático. El Silva cuenta a los jóvenes la verdad sobre el parentesco que les une: son hermanos y él es el padre de Gonzalo. El chico, furioso, pide explicaciones a su madre que le explica que no lo hizo por vergüenza.
Salvador descubre que su amigo Julio se jugó la noche anterior el cuadro de su difunta suegra en una timba de cartas. Intenta, con la ayuda de Merceditas, ocultar el robo a Diana aunque sin demasiado éxito. Salvador pondrá todo su esfuerzo en recuperar el cuadro.
El empeoramiento en el estado de salud de Rodolfo hace que Blanca se vea obligada a hablar de nuevo con Amalia, que sigue retenida junto a María.
Las tres mujeres son ahora rehenes de don Luis. Cata decide dar marcha atrás en su decisión y vuelve con Andrés que le asegura una vida normal a su lado. Lejos de allí, en el pueblo, Diana y Salvador, hartos de estar lejos de las personas que más les importan, toman una decisión que quizá no tenga vuelta atrás.