La tercera temporada de 'The Resident' arranca un mes después de la muerte de Jessie y, mientras Nic y su familia intentan lidiar con la pérdida, ella y el resto del personal tendrá que afrontar las nuevas normas y procedimientos que impondrá Red Rock Mountain Medical Group, la empresa que a partir de ahora se pondrá al frente en la gestión del hospital y que nos traerá un nuevo personaje, el de Logan Kim.
Con dicha compañía aterriza también en la ficción el Dr. Cain, una estrella de la neurocirugía que se propondrá un arriesgado reto para hacer historia y acrecentar su fama y posición. Su llegada al Chastain Park no será cómo él imaginaba. Presuntuoso y con aires de superioridad, a medida que pasen los capítulos el espectador consigue conocer mejor al personaje gracias a una píldoras muy reveladoras sobre su pasado.
Por su parte, Conrad, al que a priori todo se le pone de cara, enfrentará el fallecimiento de uno de sus pacientes más longevos. Creyéndole víctima de un riñón deficiente, pronto verá que otros pacientes en similares circunstancias también terminaron falleciendo y eso le llevará inevitablemente a Jessie. Es entonces cuando descubre que todos parecen tener un vínculo común, lo que le conducirá a un desagradable enfrentamiento del que no sabemos si logrará salir bien parado.
A pesar de que Mina y Austin ponían punto y final a su relación en la segunda temporada, ambos seguirán siendo el mejor apoyo del otro. Mientras que el cardiólogo recibirá una inesperada visita, la también cirujana se convertirá en la persona más importante de su amiga Adaku.
Al mismo tiempo, nuevos enfrentamientos, relaciones que empiezan, otras que se consolidan y fatales sucesos serán la tónica dominante en una tercera temporada de 'The Resident' a la que se incorporan rostros como Morris Chestnut, Rob Yang o Adriane Lenox, entre otros.