Año 1667. Marcado por una infancia conflictiva y humillante, especialmente tras los traumáticos acontecimientos de La Fronda, Louis XIV (George Blagden) se revela a sus 28 años como un estratega calculador, maquiavélico y sumamente inteligente, tanto en lo político como en su posicionamiento como figura mediática. Gran vendedor de sí mismo, Louis es un monarca adelantado a su tiempo que pretende romper con los reyes del pasado. Con el fin de someter a la nobleza e imponer definitivamente su poder absoluto, ordena la construcción de Versalles. Su gran proyecto, su gran sueño, un icono de su poder que simbolice el esplendor y la gloria de Francia a medida que el país se consolida como epicentro de la política, el glamour, la moda, la cultura y el arte. Lo concibe, además, como una 'jaula de oro' para mantener a los nobles bajo su control, distanciándose de ellos al tiempo que les entretiene con caprichos y distracciones.
Mientras tanto, su hermano Philippe (Alexander Vlahos), siempre a la sombra del hombre destinado a reinar en Francia, lucha por demostrar su valor y encontrar su sitio dentro de la Corte, pese a ser consciente de que sus ambiciones están condenadas a permanecer en segundo plano. Un sentimiento de frustración que Philippe arrastra desde niño y que va en aumento a medida que su hermano gana poder, pudiendo convertirse en el peor error de cálculo de Louis.