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El hecho de que en algunas partes de Estados Unidos exista la pena de muerte es un debate que sigue generando muchísimas reacciones diferentes y no deja indiferente a nadie. La serie documental 'The Last Defense' narra cómo dos casos que fueron muy polémicos en Estados Unidos podrían haber tenido un final diferente si los juicios se hubieran llevado de manera distinta.
En tan solo siete episodios, 'The Last Defense' explica el caso de Darlie Routier, una mujer acusada de asesinar a sus dos hijos y condenada a muerte. Routier avisó a la policía de que un intruso había entrado en su casa y había acuchillado a dos de sus hijos, arrebatándoles la vida. Pero cuatro días después del trágico suceso, el jurado decidió condenarla a muerte con una inyección letal. A día de hoy, Darlie Routier aún está a la espera de su ejecución pero su caso formó un auténtico revuelo en la prensa debido a la falta de pruebas, según su defensa.
Además de este caso, también se trata lo que ocurrió con Julius Jones, un joven deportista y estudiante que había tenido ciertos problemas menores con la ley pero fue acusado de asesinar a disparos a un empresario muy importante. Jones sigue en la prisión, esperando a su ejecución a pesar de que tal y como muestra 'The Last Defense' hubo muchos errores en el juicio, así como un tono racista muy notable por parte del jurado.