Tras días en el ojo del huracán por su apoyo a la manifestación negacionista del 16 de agosto en Madrid, Miguel Bosé ha reaparecido para defenderse. El cantante ha publicado un vídeo en Instagram, red social que, de momento, no le ha bloqueado por las consignas que promociona. "¿Qué queréis? ¡Me han castigado! Estoy siendo un niño malo. Entonces, por una semana no tengo una de las tres redes. ¡Ay!", comenzaba diciendo.
"Estamos aquí para hablar de los temas que os prometí y empezamos por el bicho. Se ha dicho que yo he dicho que el bicho no existía. El bicho existe y el bicho ha matado, ha matado a mucha gente. En marzo-abril de este año mató a mucha gente. Nuestros mayores, nuestros abuelos en las residencias... También se nos fueron las personas que tenían patologías previas porque su sistema inmunológico estaba muy debilitado", explica. En principio parece que el artista se desdice de los mensajes publicados días antes pero su discurso no tarda en tomar otra deriva. "Fue devastador pero, a partir de ese momento, según los datos del Ministerio de Sanidad del Gobierno de España la cifra ha ido bajando".
Miguel Bosé defiende que "los datos que manejamos son oficiales, no estamos inventando nada" y anima a "quien quiera y tenga paciencia" a que "contraste" la información. "Cuando os llegue una noticia id a buscar, haced el esfuerzo de buscar más allá, no os paréis solo en una voz, hay que escuchar muchas. De esa manera se contrasta y podemos hacernos una imagen de lo que realmente sucede", justifica.
En el vídeo presenta una actitud infantilizada y cierta dificultad al hablar, además de una voz ronca, razón por la que las redes le han comparado a Pocholo Martínez-Bordiú o a una de las parodias de Joaquín Reyes. "Escuchar solo un consejo nunca es bueno. Escuchar dos, mejor. Mejor ven cuatro ojos que dos; mejor escuchan cuatro oídos que no", insiste. Para terminar, Bosé remata su mensaje: "El bicho existe, nunca he dicho que no existiera, existe, lo que pasa es que en este momento su fuerza está disminuyendo. Eso es oficial. Mañana más, os mando un abrazo muy fuerte y seguimos hablando. Pero sigo castigado. En resumen: habemus bicho".